“Apoya local”, una frase con dos palabras pero con miles de beneficios.
Estoy muy seguro de que has escuchado la frase “Apoya el comercio local” o “Consume local”, ¿verdad? Seguro que conoces algún amigo, familiar o algún conocido que decidió emprender su pequeño negocio y te ha invitado a conocer sus productos y hasta a recomendarlo.
Bueno, pues estas prácticas tienen que ver con el desarrollo de la economía local y, aunque para ti puedan parecer pequeños logros, son mucho más importante de lo que crees. En este blog, vamos a platicarte acerca del desarrollo económico local y cómo impacta positivamente en las finanzas de los emprendedores y quienes los rodean.
¿Qué es el Desarrollo Económico Local?
Tienes toda la razón al pensar que ese pequeño negocio de esquina, esa panadería familiar, esa tienda de artesanías o hasta ese pequeño ecommerce que se sirve de redes sociales para promocionarse no son simplemente establecimientos ordinarios. En realidad, son motores muy importantes que impulsan el desarrollo de la economía local.
Por definición, esta práctica se le conoce teóricamente como Desarrollo Económico Local. Pero justo ahora no queremos meternos en términos complejos; lo que queremos es que puedas notar que esta estrategia es un “plan maestro”, pues está diseñado para sacar lo mejor de toda una comunidad.
Seguro que alguna vez has jugado un deporte. Bueno, piensa en un equipo de fútbol donde cada elemento, desde el delantero, el portero, el director técnico y hasta los fisioterapeutas, tiene un papel importante. Todo el mundo se une para hacer que el equipo gane, crezca y salga adelante.
Así, en este sistema económico, es importante que todos, no solo los pequeños emprendedores y los consumidores, sino también el sector privado y el gobierno, sumen fuerzas para mejorar la comunidad, lo que se traduce en crear riqueza, mejorar la calidad de vida y conseguir trabajos estables.
¿Cómo generar un Desarrollo Económico Local?
¿Por qué deberíamos generar un desarrollo económico local? Porque si bien es necesario propiciar mejores condiciones de inversión externa, también es necesario atender las estrategias de economía interna. De nuevo, piensa en un equipo de fútbol: no solo debe comprar jugadores, sino también mejorar su cantera para impulsar su propio talento.
Las inversiones externas pueden desaparecer rápido por diversos factores y, cuando eso sucede, las regiones que dependían de estas empresas pueden sufrir. Aquí es donde entra el Desarrollo económico local. Su misión es reducir nuestra dependencia de la inversión externa y ayudarnos a crear nuestra propia riqueza.
Ciudadanía, gobierno y sector privado, unidos por el bien común
Cuando apoyamos a estas pequeñas empresas, el impacto económico que generamos superlativo. No solo ayudamos a mantener el dinero en nuestra comunidad y apoyamos a nuestros vecinos, sino que estamos propiciando la generación de empleo y una economía estable.
Pero por supuesto, la responsabilidad no es únicamente de nosotros como consumidores finales, sino que el apoyo de empresas del sector privado y del gobierno, como subsidios, planes de crecimiento y financiación y otros más, potencian el desarrollo.
Cada moneda que gastamos en un negocio local es como una semilla que plantamos en el suelo de nuestra economía local, que eventualmente crece y da frutos en forma de prosperidad para todos; y cada vez que el sector privado o el gobierno apoyan estas prácticas, es como añadir abono o composta para que la semilla crezca más fuerte, más rápido y con mejor calidad.
Desarrollo Económico Local sostenible para todos
Como ya vimos, el desarrollo económico local es muy importante para todos, pues nos permite crecer y apoyarnos mutuamente. Por eso, cada vez que escuchas “Apoya el comercio local” o “Consume local”, no solo están hablando de “echarle la mano” a alguien, sino de algo más valioso.
Estamos hablando de un compromiso con el crecimiento y el bienestar de nuestra comunidad. Porque recuerda, cuando apoyas a la economía local, no solo estás apoyando a una empresa, estás apoyando a que todos los que te rodean tengan mejores condiciones e, incluso, tu familia y hasta tus hijos podrían beneficiarse de ello.
La próxima vez que pases frente a la tienda de tu amigo, o a esa panadería familiar, considera que tú haces una gran diferencia. Porque más allá del dinero o del precio que pagues, tu solidaridad para todos es invaluable.
